Inés, la hipopótama más longeva en la Ciudad de México, que habitaba en el Zoológico de San Juan de Aragón, murió tras más de 50 años de vida.
Inés superó por mucho la expectativa de vida de los hipopótamos, pues en libertad viven entre 25 y 30 años.
Durante más de 25 años Inés fue cuidada por Josué Chaparro Cedeño, quien aseguró que le gustaba la tranquilidad aunque siempre permanecía en alerta.
Durante su estadía en el Zoológico de San Juan de Aragón la hipopótama tuvo cuatro crías.
Por su avanzada edad la mamífero fue sometida a continuos chequeos médicos en los que se le detectó, por ejemplo, problemas en articulaciones.
Era aseada diario y el agua de su charca cambiada dos veces por semana.
Con información de López-Dóriga Digital