** CIBanco demanda a EE. UU. tras sanción que amenaza su existencia.
El banco mexicano busca anular sanciones que lo aislarían del sistema financiero estadounidense y afectaría sus fideicomisos.
CIBanco presentó una demanda formal contra el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y la Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN), argumentando que las sanciones emitidas en junio lo exponen a la “desaparición inminente”. La orden, que entrará en vigor el 4 de septiembre, prohíbe a las instituciones financieras estadounidenses operar con CIBanco.
El banco mexicano asegura que la medida fue emitida sin previo aviso ni oportunidad de confrontar pruebas, lo que constituye una violación del debido proceso bajo la Constitución de EE. UU. Según la acusación, CIBanco habría facilitado el lavado de dinero para cárteles como Jalisco Nueva Generación, Sinaloa y del Golfo, incluyendo transferencias para precursores químicos de fentanilo.

CIBanco sostiene que estas acusaciones carecen de sustento y no reflejan su actividad legítima. La entidad afirma que FinCEN no proporcionó detalles adicionales sobre los supuestos movimientos y que la mayoría de los señalamientos se basan en conexiones indirectas o transacciones internacionales sin relación directa con narcóticos.
El impacto de la sanción ya se siente: CIBanco perdió relaciones con bancos corresponsales estadounidenses, sus ingresos por cambio de divisas cayeron más del 90% y sus depósitos totales disminuyeron más del 40%. La medida también amenaza más de 40 mil millones de dólares en activos administrados en fideicomisos, incluyendo fondos de pensiones y de inversión.

Ante el riesgo de un colapso financiero, el Gobierno de México, a través de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, ordenó transferir los fideicomisos de CIBanco, Intercam y Vector a bancos de desarrollo. La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que no hay pruebas de lavado de dinero y que el banco mantiene disposición para colaborar con autoridades mexicanas y estadounidenses.
La demanda de CIBanco busca anular la orden de FinCEN y garantizar la continuidad de sus operaciones, argumentando que la sanción carece de fundamentos legales y pone en riesgo la estabilidad del sistema financiero mexicano. La resolución del tribunal será clave para definir el futuro del banco y la confianza en la banca nacional.
MDR.