Gustavo Alarcón, alcalde suplente de Chilpancingo, hizo un llamado urgente a los Gobiernos federal y estatal para atender la situación de violencia en la región, tras el brutal asesinato del presidente municipal titular Alejandro Arcos Catalán.
En entrevista con Joaquín López-Dóriga para su espacio en Radio Fórmula, Alarcón Herrera apuntó que todavía sigue sin hablar con la mandataria estatal Evelyn Salgado o con algún representante de la Administración federal.
“Ser suplente implicó que haya hecho un acuerdo de proyectos de trabajo con el presidente, pero nunca pensamos que iba a ser por esta vía”, dijo.
“Después de estar en una encrucijada de dolor tenemos que levantarnos como chilpancingueños, los guerrerenses, a trabajar como personas de bien. Después del respeto hacia la familia de nuestro amigo, alguien tiene que hacer el trabajo para que Chilpancingo siga adelante”, señaló.
Seguir con los proyectos de nuestro gran amigo, seguir el trabajo ya planteado y pedirle a nuestras autoridades dentro del rubro federal y estatal que volteen hacia Chilpancingo y que nos ayuden en el tema de la seguridad”, puntualizó.
El alcalde suplente apuntó que se debe poner todo por parte de los tres niveles de Gobierno para alcanzar la paz en Chilpancingo, azotada por los grupos del crimen organizado.
“Tenemos que poner todo de nuestra parte para que esto termine y logremos una paz basada en el bienestar, en la verdad, en el honor, en dar resultados, en trabajar por el municipio”, lanzó.
Adquirí un compromiso moral y un compromiso con mi amigo (Arcos Catalán) […] Tenemos que hacer una enérgica protesta para poder levantarnos y decirles que aquí estamos en Chilpancingo, que nos ayude la Federación y el Gobierno de Guerrero, es un problema que tienen qué corregir”, sostuvo.
“Es una expresión que nunca se lo espera uno (la forma en que fue asesinado Alejandro Arcos). Nunca había sucedido en el caso de los presidente municipales, pero esto tiene que cambiar. Tenemos que hacerlo”, argumentó.
Alarcón Herrera asume como alcalde de Chilpancingo, tras la consternación que provocó el domingo el brutal homicidio del presidente municipal titular, Alejandro Arcos Catalán, quien llevaba apenas seis días en dicho garco.
El cuerpo de Arcos fue encontrado decapitado en calles del municipio guerrerense. siendo localizada su cabeza arriba del toldo de un automóvil.
Días antes, el secretario general de Gobierno de Arcos, Francisco Tapia, también murió asesinado.
Con información de López-Dóriga Digital