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Los visitantes de Amazon Fresh escanean una aplicación de teléfono inteligente al ingresar y se les factura automáticamente cuando se van.
La tienda almacena cientos de artículos de marca propia, así como productos de terceros, y también sirve como un lugar para recolectar y devolver artículos comprados en línea.
Los activistas han expresado su preocupación por la privacidad, pero un experto minorista dijo que la apertura marcó un «momento decisivo».
«Tener presencia física permitirá a Amazon abordar algunas de sus debilidades, como el creciente costo de las entregas y devoluciones», dijo Natalie Berg, analista de NBK Retail.
Pero dijo que no creía que representaría una amenaza para las principales cadenas en el corto plazo.
«Los supermercados han tenido algunos años para preparar y probar sus propios conceptos de compra sin pagar».
El enfoque de Amazon, sin embargo, promete una experiencia más «sin fricciones» que la de otros minoristas.
