La Iglesia católica en México pidió a la población mantener el cuidado y no relajar las medidas de prevención contra COVID-19 en temporada invernal y de peregrinación, pese a la eliminación del uso del cubrebocas y otras medidas adoptadas en la nueva normalidad por la Secretaría de Salud del Gobierno Federal.
“Pese a que los efectos y riesgos de la enfermedad han disminuido, es importante ser prudentes y tener claro que los contagios aún existen, sobre todo ante la próxima temporada invernal”, expresó la Arquidiócesis Primada de México en la editorial de su seminario “Desde la Fe”.
La Iglesia también recordó la advertencia que realizó la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS) sobre un posible repunte en los casos de coronavirus en el invierno.
“Es importante sumar esfuerzos para evitar el incremento de nuevos casos de covid-19 y las afectaciones que se presentan por las enfermedades respiratorias estacionales”, insistió.
La Arquidiócesis también pidió reforzar las campañas informativas dirigidas a la población mexicana.
Desde hace una semana, la Secretaría de Salud de México determinó relajar las medidas obligatorias para mitigar la propagación de COVID-19, entre las que destaca la eliminación del uso obligatorio del cubrebocas en algunos espacios cerrados.
Peregrinaciones felices y seguras
La Iglesia católica también señaló que este anuncio por las autoridades sanitarias mexicanas coincide con el inicio de muchas peregrinaciones hacia la Basílica de la capital de México, la iglesia más representativa del país.
En este sentido, también invitó a los fieles católicos mexicanos a retornar a los recintos religiosos y a retomar con alegría sus peregrinaciones, pero con todas “las precauciones necesarias para evitar cualquier repunte de COVID-19”.
La Iglesia católica recordó que la peregrinación más esperada en México es la del próximo 12 de diciembre a la Virgen de Guadalupe, que reúne a miles de mexicanos en la Basílica.
Además, recordó que el pasado 12 de octubre se celebró la Romería de la Virgen de Zapopan y que provocó la presencia de 2.4 millones de personas, que caminaron entre rezos, cantos y en medio de un ambiente de fiesta, de la Catedral de Guadalajara a la Basílica de Zapopan.
También advirtió que el próximo 28 de octubre, en la Iglesia de San Hipólito y San Casiano de la Ciudad de México, se realizarán los festejos en honor a San Judas Tadeo y se espera que cientos de miles de fieles se hagan presentes en la zona que rodea el templo.
“Nuestra comunidad cristiana es un espacio de puertas abiertas, y las peregrinaciones esperaban este momento para caminar y orar, para agradecer el cuidado de Dios y poner en sus manos aquello que más les preocupa”, concluyó.
Con información de EFE